domingo, 22 de abril de 2018

El Duranguesado

Aprovechando el buen tiempo que daban para este fin de semana, dentro de este invierno y primavera que estamos teniendo tan malos, estábamos obligados a aprovecharlo, así que sin dudarlo mucho preparamos una escapa rápdia de fin de semana a la zona de Duranguesado, en el corazón de Vizcaya; esta es una zona por la que he pasado bastantes veces pero que quería conocer más a fondo.

Sábado, día 21
Llegamos a media mañana a Atxondo con la intención de hacer la vía verde de Arrazola, una sencilla vía verde que se puede hacer perfectamente a pata debido a su escasa longitud (4,5km ida y otros tantos de vuelta). -Ver ruta en Senderioja-

 Vía verde de Arrazola

Después de comer nos acercamos a Elorrio, un pueblo plagado de palacios y caserones históricos. Para conocerlo dimos una vuelta por las calles del casco viejo donde se concentra la mayor parte de estos edificios históricos; también estuvimos un rato sentados en una terrazita de la Gernikako Arbola Plaza, el punto neurálgico del pueblo donde están la enorme Basílica de la Purísima Concepción, el Ayuntamiento y el frontón.

 Gernikako Arbola Plaza

Una visita que también se suele hacer en Elorrio es acercarse a ver la Necrópolis de Argiñeta, a poco más de un kilómetro del núcleo urbano (se puede ir perfectamente andando).

Necrópolis de Argiñeta (I)

 Necrópolis de Argiñeta (II)

Mirando en el mapa de furgoperfectos ví que el punto final de la vía verde de Arrazola está marcado como tal así que decidimos regresar hasta allí, ahora con la furgoneta, para pernoctar. Es un muy buen lugar para ello ya que es tranquilo y tiene mesas de picnic, fuente, baños públicos e incluso bar.

Domingo, día 22
El Domingo nos desplazamos hasta el llamado "Balcón de Vizcaya" para acometer la ascensión al monte Oiz -Ver ruta en Senderioja-.

Balcón de Vizcaya

 En la cima del monte Oiz

Tras la ruta hicimos la suficiente hambre como para comer de pinchos en Durango. Mientras recorrimos los bares del Casco Viejo aprovechamos para conocer la fisionomía de esta histórica villa, ahora importante por su actividad industrial.

A destacar en el Casco Viejo la Basílica de Santa María de Uribarri, especialmente por el enorme pórtico de madera que tiene; y también el Ayuntamiento, el cual destaca por su colorida fachada.

Tras acabar hartos de pinchos nos dimos una vuelta por otros puntos variados de Durango: el mercado, el gaztetxe, La Ermita de la Magdalena, la plaza Ezkurdi y siguiendo el curso del rio llegamos a la Plaza Pinondo donde están el Arco y la Iglesia de Santa María.

Pórtico de la Basílica de Santa María de Uribarri

Ayuntamiento de Durango

Mercado municipal

Plaza Ezkurdi

 Iglesia de Santa Ana

Desde allí nos alejamos un poco más otra vez siguiendo el curso del río para llegar hasta la zona de Tabira donde está la Ermita de San Pedro. Allí encontramos por sorpresa las viejas instalaciones de una fundición donde sorprendentemente vimos que había un boquete a pie de calle para colarse.

Con esta extraña visita acabamos nuestro agradable fin de semana por el Duranguesado.